El equipo de Slickforce estuvo en Las Vegas asistiendo al PhotoshopWorld West!




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Acabamos de volver del PhotoshopWorld en Las Vegas que se celebró la semana pasada y ¡lo pasamos genial! ¡Nos llevamos a las imponentes modelos Esther Hanuka y Ayanna Jordan (discos 1 & 7 para los seguidores de Mastering Retouching) en el coche hasta la Ciudad del Pecado con una gran misión que cumplir!

 

La gran noticia en esta exhibición fue que los envíos de los iPad con Mastering Retouching estaban listos y  provocaron que muchos clientes curiosearan alrededor del stand. También aproveché nuestra presencia en el PSW para anunciar la organización de nuestro primer PhotoKamp, un taller de 3 días dedicado a fotógrafos y artistas que se celebrará del 12 al 14 de Noviembre en Los Ángeles. El pre-lanzamiento de PhotoKamp fue acogido con una respuesta impresionante… ¡tanto que está casi completamente lleno después de dos semanas de su anuncio inicial!

 

Además, este año hemos duplicado el tamaño de nuestro stand desde la exhibición de Orlando, lo que nos permitió tener más oportunidades de conocer a nuestros amigos y seguidores, así como a fotógrafos de gran talento y artistas especializados en Photoshop. El “niño prodigio ” alemán Calvin Hollywood se pasó por allí para saludarnos y conocer a las modelos y también tuvimos la suerte de disfrutar de la presencia de su majestad Matt Kloskowski (un genio de PS), Dave Cuerdon (una leyenda del retoque) y el gurú de Wacom, Wes Maggio.

 

Pero, con todo el respeto a los increíbles artistas que conocimos, nadie me impresionó más que mi querido equipo de Slickforce. El Director de Operaciones, Kevin Savarese, la retocadora, Joyce Park y el ayudante Derek Eskridge ayudaron a las modelos Esther y Ayanna a informar al público sobre la firma Slickforce; igualmente, los fotógrafos Clint Davis y Matt Timmons se unieron gentilmente a nosotros para mostrar todo su apoyo. Me siento honrado y emocionado por la dedicación de mi equipo, lo cual me motiva aun más para seguir impulsando el crecimiento de nuestra firma.

 

 

INDICE:
SUPERIOR: ¡Mastering Retouching en el iPad!
1-9: El Equipo de Slickforce enseña a PSW cómo se hizo.
10: El equipo de Slickforce dando forma a nuestra firma.
11: El equipo (Izd-Dcha): Kevin Savarese, Joyce Park, Clint Davis, Ayanna Jordan, yo, Esther Hanuka, Derek Eskridge, Matt Timmons
12: De fiesta en Blush @ Wynn
13: Las modelos Ayanna Jordan  Esther Hanuka
14: Ayanna Jordan, Nazanin Mandi se unen al artista de R&B, Miguel para su actuación en el club Eve

Campaña Internacional HairLocs 2010

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Esta semana, HairLocs International lanzó su campaña en toda la nación a través prácticamente de cada medio de comunicación posible, incluyendo  las revistas Ocean Drive, LA Confidential, Gotham, Hamptons, y Vegas. A través de una buena amiga mía, Lupe Ceballos, con la que solía fotografiar artistas de la industria del disco, pude traerme la campaña a SlickforceStudio. Nos ocupamos de todo, desde la producción hasta el casting – por eso seguramente reconoceréis algunas de las supermodelos favoritas de Slickforce en la campaña.

 

La sesión fue increíblemente divertida, en especial para el estilista de peluquería Al Ingram, porque tuvimos que experimentar con muchas maneras de crear un pelo que fuera atractivo en la cámara – y todos sabéis lo que me gusta que el pelo sorprenda por su brillo y energía. Nuestra artista de maquillaje, Gaby Ramos, dio en el clavo en todas las tomas de la campaña, lo cual fue incluso más impresionante dado el ámbito tan diferente de modelos y rasgos con los que trabaja.

 

¡Gracias a HairLocs y al increíble equipo de Slickforce por ayudarme a crear una campaña tan fantástica!

 

MODELOS (De izq. a dcha): Airess Padda, Nazanin Mandi, Ayanna Jordan, Jenifer Richardson, Remington Nelson

Diario de Viaje 2010: KENIA – Bosques Sagrados y Monos

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Aunque ciertamente encontré mi safari y mi experiencia viviendo con los Maasai absolutamente indescriptibles, debo confesar que si tuviera que resumir mi viaje a Kenia en una palabra, la respuesta sería muy sencilla: monos.

 

Mi cabaña en la playa, a pesar de estar a pocos pasos del Oceáno Índico, estaba rodeada de árboles gigantes – palmeras, baobas y manglares – que eran los hogares de un montón de familias de monos. Éstos son siniestramente inteligentes, y te observan – te estudian – como si fueran mini-humanos cínicos, intentando determinar si eres algo de lo que deban tener miedo o no. Para mi sorpresa, me hice amigo de algunos de los monos Sykes grises – los monos Colobus blancos y negros no me prestaban demasiada atención. Al final de mi viaje, podía entrar en el porche de la cabaña, hacer un tipo de llamada salvaje y media docena de monos aproximadamente literalmente se dejaban caer de los árboles colgados de sus colas en el porche. Se sentaban allí, esperando pacientemente, como los perros pero sin ladrar, hasta que sacaba fruta de una bolsa – que la cogían de mi mano y luego se sentaban tranquilamente para comérsela. Nunca había visto algo parecido. Totalmente encantados comían bananas, manzanas….e incluso ¡galletas! La pura interacción solo con los monos dejó mi experiencia en el safari más como algo puramente turístico.

 

Decidí también hacer una visita a Kaya Kinondo, uno de los bosques sagrados secretos en los que está inspirada Avatar. Los árboles no parecían de este mundo, con raíces creciendo en todas direcciones, incluso hacia arriba. El bosque contenía árboles medicinales, plantas y especias utilizadas para cocinar e incluso algún follaje utilizado para los rituales de los dioses. Era un lugar en paz, y ahora entiendo por qué generaciones de las tribus Digo han encontrado su centro espiritual aquí.

 

Cuando volví a mi cabaña en la playa esa noche, me encontré el sitio todo revuelto y supe que alguien había entrado. Extrañamente, mi cámara y mi portátil estaban allí, pero tiradas por los muebles había mondas de bananas. ¿Quién había entrado en mi casa, pensé, que se había comido todas mis bananas y había dejado una Canon 5D? ¡Estaba claro! Me habían robado los monos!

 

ÍNDICE:
Imágenes superiores: Kaya Kinondo, Un mono Sykes comiendo mis galletas
1-5: Kaya Kindondo, el bosque secreto
6: Mi cabaña en la playa en Diani
7: Monos Colobus blancos y negros
8-14: Mis amigos Sykes comiendose toda mi comida

 

La Creación de una Súperestrella: Kendall Jenner, 1ª Parte

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No todos los días uno puede trabajar con alguien que sabes que va a ser grande en un futuro. Quiero decir que es diferente si ya es una estrella… porque hay una energía especial en una sesión cuando sabes que un día el público volverá a ver estas tomas con las que esta estrella dio sus primeros pasos.

 

Semejante suerte se me presentó de bruces la semana pasada cuando Kris Jenner, la magnate y matriarca del clan Kardashian, me pidió que fotografiase a su hija Kendall y realizar su Book para la Agencia de Modelos Wilhelmina. Le habían gustado mucho las imágenes que hice a Kim, Khloé, y Kourtney, y me preguntó si podía hacer lo mismo con Kendall. El único problema era, simplemente, que ¡sólo tenía 14 años!

 

Kendall fue desde el principio una trabajadora nata. Le pedí si la importaba meterse en el agua, colocarse entre las rocas, etc, y simplemente asentía con la cabeza y me decía que haría todo lo que fuera necesario para lograr una imágenes artísticas. Gracias a sus hermanas, Kendall confiaba en mí. Así que, como hago con todas mis modelos, nos quitamos de encima inmediatamente la parte más dura, porque nunca hay suficiente luz solar para calentarse adecuadamente. Coloqué a Kendall en una roca en medio del Océano Pacífico y mantuvo sus poses con una profesionalidad increíble – y sus expresiones con intensidad – incluso aunque las olas la estaban mojando continuamente la espalda.

 

El resto de la sesión siguió del mismo modo, y la curva de aprendizaje de Kendall iba cada vez más en aumento. Me tenía continuamente impresionado con lo rápido que aplicaba lo que había aprendido de un montaje al siguiente. Cuando esta niña cumpla 21 años, que es la edad en la que suelo fotografiar a las modelos, espero de ellas que hayan ensayado durante unos años delante del espejo y se hayan trabajado las poses. Pero para una cría de 14 años sin casi experiencia (salvo sus famosos genes), tengo claro que va a lograr un gran éxito desde ya.

 

No esperaba la controversia que estas tomas han generado – ya se han publicado en E! News, People, In Touch, Extra, y Access Hollywood. Supuestamente, algunos pensaron que las tomas eran demasiado provocativas para una modelo tan joven (video ejemplo aquí). Pero honestamente, deberíamos hacer una distinción entre las modelos de moda y las modelos de glamour. Si observamos los primeros trabajos de Adriana Lima, Brooke Shields, Miranda Kerr—y muchas más—sus Books están repletos con imágenes sensacionales no demasiado conservadoras que las lanzaron como súpermodelos antes de llegar a los 16 años. En mi opinión, que la modelo lleve un suéter o un traje de baño no tiene mayor importancia, siempre que la toma se haga con gusto. Hice un esfuerzo conjunto para mantener esta sesión completamente tolerada para menores de 13 años.

 

Tengo que agradecer especialmente a la estilista Monica Rose todo su trabajo en esta sesión, ya que no solo trajo, como siempre, un vestuario increíble para Kim, y se sentó conmigo al lado del portátil para asegurarse de que cada toma era perfecta, sino que además estuvo esperando con un albornoz y una toalla, lista para abrigar a Kendall cada vez que ésta corría temblando desde el agua. ¡Eres la mejor! Un beso.

 

Créditos:
Estilismo y Vestuario: Monica Rose
Maquillaje: Joyce Bonelli
Peluquería: Rob Scheppy
Tomas de Producción: Derek Eskridge & Christian Arias

Diario de Viaje 2010: KENIA – La costa y las noches en África

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Puedo afirmar con seguridad que la costa keniata es lo más cercano al paraíso que he visto. Después de mis excursiones alrededor de Nairobi y más hacia el interior, decidí dirigirme a la costa buscando algo más de tranquilidad. Cogí un tren nocturno  de Nairobi a Mombasa, que fue sorprendente… en uno de esos coche-litera desvencijados… me sentía como si estuviera en el Orient Express. Para mi gusto, Mombasa era un lugar demasiado comercial y con mucha gente, así que me dirigí hacia el sur a la playa de Diani, a una hora más o menos de la frontera con Tanzania. Una vez allí, supe en unos minutos que había encontrado exactamente lo que estaba buscando.

 

Alquilé una cabaña en la playa con dos habitaciones, a tan solo unos pasos del Océano Índico, por menos de $50/noche. No me lo podía creer. Todas las mañanas, un pescador llamado Ali venía a la puerta y me vendía pescado fresco y compraba frutas y verduras directamente de los granjeros locales. Nunca había probado la fruta de la pasión e instantáneamente se ha convertido en mi fruta favorita para siempre. Era el menú más saludable que jamás haya comido. Alrededor de Diani había muchos santuarios salvajes. Entre ellos se encontraba Shimba Hills, donde logré ver el raro ejemplar del antílope negro, que se encuentra en solo dos lugares del mundo. De todos modos, tuve que recordarme a mí mismo que había venido aquí a relajarme, así que decidí no quemarme intentando ver demasiado.

 

Las playas eran perfectas, largas, de arena blanca y ni un alma en ellas, salvo algunos vendedores de baratijas. El océano estaba increíblemente caliente, así que cuando no estaba relajado en la playa, me dedicaba a bucear durante horas. Hice un montón de amigos en Diani – la gente es realmente sincera y hospitalaria. Incluso logré encontrar un grupo parecido al de mis amigos en casa, lo que a menudo me hacia olvidar que estaba al otro lado del globo.

 

 

No hay palabras para describir las noches en la costa. Simplemente, echa un vistazo a las imágenes y comprenderás por qué. No había prácticamente ninguna luz que contaminara la visión de las estrellas más brillantes y la realización de la fotografía astral más increíble. Cada noche iba a ciegas desde mi cabaña a la playa, donde montaba mi cámara para hacer unas tomas nocturnas indescriptibles. No me podía creer las exposiciones que estaba consiguiendo. Todo ello consolidó aun más mi amor por Kenia.

Tutaonana, inshallah.

 

ÍNDICE:
1-4: Tren nocturno hacia Mombasa, la segunda toma es una exposición de 30 segundos a las 3am.
5-8: Shimba Hills, saltamontes, antílope negro, elefantes
9: Mi cabaña en Diani
10: La vista desde mi casa en la playa
11-15: Mi santuario oculto, playas de arena blanca
16: Mis amigos en Diani: Didi, Gitz, Sidney, Ali Khan
17-21: Atardecer en la costa keniata

La Creación de una Súperestrella: Kendall Jenner, 2ª Parte

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Watch out, world!

Como ya habréis leído en mi post del primer día de estas tomas, esta sesión estaba planeada para crear el Book de Kendall Jenner para Wilhelmina Models desde cero. Esta sesión además generó más controversia que cualquier otra sesión que haya fotografiado jamás.

 

Hasta la fecha, estas fotos, o los debates sobre ellas, han sido presentados en Larry King Live, E! News, Inside Edition, Access Hollywood, US Magazine, OK! Magazine, The Huffington Post, y en más de 50 blogs.

 

Igual que el primer día, Kendall se comportó de manera absolutamente natural delante de la cámara y fue un gran placer trabajar con ella. A posteriori, estoy contento de habernos quitado de encima las tomas más difíciles en la playa el primer día, porque hizo que la segunda sesión en el estudio fuera pan comido.

 

Mi agradecimiento especial a Clyde Haygood por la peluquería, Rob Scheppy por el maquillaje, Monica Rose por su, como siempre, excelente estilismo, mi equipo de expertos de Slickforce y a Kris Jenner por ¡guiarme a través de la tormenta publicitaria que se nos avecinaba!

 


Diario de Viaje 2010: KENIA – Viviendo con los Maasai

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Lo recuerdo claramente. Tenía 8 años y estaba en la biblioteca de la escuela elemental Pleasant Plains ojeando mi primera National Geographic, y ahí es cuando los vi – mi primera tribu africana. Lo supe desde ese momento: Tengo que ir a conocerlos – quiero vivir con ellos, aprender su idioma, vestir como ellos y hacer lo imposible para convertirme en uno más de la tribu. Bueno, al fin y al cabo ese era mi sueño.

 

Así que el mes pasado, mientras estaba en el safari de la reserva salvaje del Masai Mara en Kenia, le pregunté al conductor si me podía poner en contacto con el jefe de uno de los pueblos locales (mzeé). Pensó que estaba loco, pero al final lo consiguió sin demasiados problemas. Me encontró un guía que no solo vivía cerca de una tribu Maasai (manyatta), sino que además hablaba un poco de inglés gracias a que había trabajado por las noches en un safari como guarda de seguridad. Quedé a la mañana siguiente con él, se llamaba Meingati, y me presentó al hijo del jefe, Kamwana (el jefe estaba visitando a unos amigos en otro pueblo). Kamwana me dijo el precio por estar en el pueblo durante una hora y hacer algunas fotos, pero le dije educadamente, “no gracias – yo quiero vivir con vosotros de verdad…” Así que finalmente aceptó que me quedara en la tribu durante dos días, y solo me costó una vaca.

 

Mis nuevos amigos me dieron la bienvenida a la aldea de Oltepesi. Me presentaron a los miembros de la tribu y me enseñaron las típicas cosas que muestran a los turistas, es decir, como hacer fuego y algunas danzas tribales, incluido el salto ceremonial, donde los hombres compiten para conseguir esposa comprobando quién alta más alto (en serio). Finalmente, logré convecerles de que no necesitaban entreterneme – solo quería hacer, si podía, lo que ellos hicieran. Así que, nos adentramos en la selva, siguiendo un antílope por los restos de sus heces, limpiándose los dientes con ramas deshilachadas, sentarnos en la sombra evitando el calor del sol y durmiendo un rato. Después nos fuimos al mercado Maasai, que solo ocurre una vez por semana – tuve mucha suerte de presenciarlo. Cientos, sino miles de Maasais vienen de todas las aldeas, incluso desde Tanzania, para intercambiar, regatear y comprar de todo, desde cabras y vacas hasta armas (dagas, lanzas, arcos y flechas, ¡INCREÍBLE!, me parecía que estaba jugando a Dragones y Mazmorras). Conocí a muchos amigos, algunos desde tierras muy lejanas, y TODOS, extremadamente amables. Aproveché esta oportunidad para aprender un poco del idioma Maasai (Ma), que es totalmente diferente del Swahili que se habla en Kenia. Entre mis palabras favoritas estaba”Ero Sopa” (un “hola” coloquial), “Ashi ashi” (gracias), y “Olesére ölcheré” (adiós, amigo).

 

Cuando volvimos al pueblo, estuve jugando con los niños durante más de dos horas. Me sorprendió ver que algunos de ellos entendían un poco de inglés. Me di cuenta de que muchas tribus indígenas están en peligro de extinción cultural, tal vez más que los animales en las planicies vecinas. Esa noche, bebí leche de cabra de una calabaza gigante tallada, escuché canciones tribales y dormí en una piel de vaca flotante estirada entre cuatro pértigas –  fue una de las noches más relajantes de mi vida. La vivienda en la que estuve estaba increíblemente bien construida, realizada por las mujeres de la aldea que se ocupan de todas las construcciones y que han levantado la aldea entera con sus manos. Ahí estaba tumbado en mi cama de vaca, asombrado por las maravillas del mundo, y enamorado de todo lo que estaba viviendo. La fresca brisa nocturna hizo que me durmiera en unos minutos.

 

A la mañana siguiente, Kamwana vinó a mi cabaña. Era una persona muy segura de sí misma, además de otros muchos en la aldea, poseía esa seguridad propia de aquel que sabe que algún día será el próximo jefe de la tribu (y tendrá cinco esposas). Me dio un brazalete Maasai, tejido minuciosamente de manera muy bella cuenta por cuenta, y un shúká, la capa tradicional que llevan los hombres. Además me puso un nombre Maasai: Sarúni, que significa “el que ayuda”. Me marché justo antes de que cayera la noche del segundo día, agradeciendo a mis amigos todo lo que habían hecho por mí  y deseándoles lo mejor del mundo – esperando que no sea la última vez que nos veamos. No hice todas las fotos que pensé que iba a hacer. Sentía que un bombardeo de fotos habría convertido mi experiencia en simplemente un circo y quería que fuera lo más genuino posible. En ocasiones, solo necesitas apagar la cámara y vivirlo de verdad.

 

El tiempo que pasé con los Maasai fue un momento determinante en mi vida, porque simbolizó la realización de un sueño de la infancia. Solo espero que estas tribus todavía estén allí durante mucho tiempo para que las futuras generaciones también puedan soñar. Olesére, ölcheré.

 

INDICE:

 

IMÁGENES SUPERIORES: (1) Niño Maasai en Oltepesi, (2) mi guía, Meingati

 

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1: (izd. a dcha) Meingati, Kamwana, Yenku, desconocido
2: Una niña en la aldea y una casa tradicional Maasai
3: Las mujeres Maasai realizando una danza ceremonial
4: Kamwana haciendo fuego
5: Mirando a Tanzania
6: Dándome la bienvenida en la aldea
7: Dentro del hogar de Kamwana (30 segundos de exposición…. estaba totalmente oscuro hasta que se te ajustan los ojos)

 

FILA 2
1: Bebiendo leche de cabrra de una calabaza tallada
2: Yenku
3: El futuro jefe, Kamwana (derecha)
4-7: Niños de la aldea Oltepesi

Diario de Viaje 2010: KENIA – Safari en el Masai Mara

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Varias veces al año, me fuerzo a salir del país. Cuando lo hago, vuelvo a reunirme con lo que para mí son las cuatro erres fundamentales: una posibilidad de relajarme, reflexionar, re-enfocar la energía y recordarme a mí mismo por qué trabajo tan duramente.

 

Esa primavera he pasado un mes en Kenia y dos días después de aterrizar, estaba subido en un autobús camino del Masai Mara, la enorme reserva salvaje entre la frontera de Kenia y Tanzania. Al fin y al cabo, ¿cómo puede un fotógrafo que se precie dejar pasar la oportunidad de ver a los animales salvajes más grandes de la tierra en su hábitat natural?

 

Me traje la Canon 5DII a este viaje, porque la Hassy era demasiado grande e inflexible para este tipo de escenarios. Además estaba muy contento con los resultados de la Canon en mi viaje a Marruecos del año pasado. Realmente me quedé sorprendido de ver que casi todo el mundo en el safari hacía tomas con pequeñas cámaras digitales automáticas, salvo los siempre bien preparados turistas japoneses.

 

El conductor de mi jeep, Lawi, fue increíblemente complaciente y, además, tenía un impecable sentido del tiempo. Vimos guepardos persiguiendo a un antílope, una familia de leones cazando un búfalo, y enormes elefantes de infarto – criaturas tan salvajemente bellas que la cámara nunca podrá hacerles justicia. Observar un elefante salvaje de cerca (estábamos a unos 6 pies de distancia) te hace sentir como si estuvieras en El Señor de los Anillos…. ahora son oficialmente mis animales favoritos sobre la tierra.

 

Índice:
1: Tormenta en el Mara
3: Ñu
8: Carraca Lila
11-13: Leones cazando un búfalo africano
14: El Masai Mara al atardecer

¡Slickforce trae el glamour a la Costa de Amalfi para SHOW Italia!

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Supongo que el sueño de todo fotógrafo es viajar por el mundo y hacer tomas de lugares con una arquitectura atemporal y aguas cristalinas y perfectas. Así que cuando el editor de SHOW me comentó la idea de organizar una sesión internacional para la prometedora modelo Laura Doré, me pareció más que perfecto y sugerí hacer la sesión en Italia.

 

He tenido múltiples excusas para viajar a Italia en los últimos años, comenzando por las tomas para Ciudades bajo Tierra para el Canal Historia a principios de 2008. Desde entonces he vuelto más de 6 veces y me he estado esforzando por mejorar mi italiano en cada viaje. Una vez que el concepto de la revista tuvo luz verde, me puse inmediatamente en “modo productor.”

 

La Costa de Amalfi es mundialmente famosa por su ambiente y paisaje marcadamente europeo así como por sus increíbles vistas. Sabía que no teníamos escasez de lugares donde realizar las tomas, así que me marché una semana antes que el resto del equipo, explorando algunos puntos importantes y asegurando el equipo de iluminación en Roma (tenía la intención de recrear una sesión a escala Slickforce, porque no podía de ninguna manera transportar mi equipo desde Estados Unidos). Una vez que elegí las ubicaciones, me traje a lo mejor de lo mejor desde LA, incluyendo a mi maquilladora y artista Gaby Ramos, al peluquero Al Ingram, a mi ayudante Christian Arias y a la extraordinaria estilista de vestuario, Diana Chan. También contrate ayudantes de Londres e Italia, con los que ya había trabajado en proyectos previos en Europa, ¡ah! y un conductor local con una furgoneta de pasajeros. Alquilamos más de 7 cabañas en el pequeño pueblo costero de Sorrento, donde vivimos durante 5 días.

 

Una vez que nos quitamos de encima la logística masiva, pudimos finalmente concentrarnos en la sesión. Como tengo mi propio sistema, la mayoría de los montajes de iluminación no variaron mucho del trabajo que realizo habitualmente en casa. De lo que estaba muy orgulloso, sin embargo, fue de los montajes en las playas de Capri. Capri es una pequeña isla – y no hay muelles o diques en las playas – así que pusimos todos los equipos en barcos a motor y los cruzamos lo más cerca que pudimos a la costa. Después lo descargamos en balsas inflables, y literalmente llevamos empujando las balsas hasta tierra con los generadores y todo. Este fue el día más duro que he sufrido jamás pero simultáneamente la sesión más divertida y alucinante que haya realizado nunca.

 

Mira con detalle los montajes. ¡Teníamos luces colgando de las rocas, flashes de anillo levitando sobre el mar, e incluso iluminación desde barcos en movimiento! Christian sabía que yo había insistido en hacer tomas atados (aborrezco iluminar a una cámara LCD), así que desarrolló unos herrajes para que los cables de mi portátil y mi Firewire flotaran hasta tierra, mientras que todos nosotros hicimos nuestro trabajo colgados de las rocas o en el agua. Estas tomas me hacen reír porque mi increíble equipo hizo lo mismo que hacen en casa, solo que esta vez estaban en trajes de baño y metidos hasta el ombligo en el agua. Esta es la sesión que todo fotógrafo soñaría hacer – esa que nunca, nunca olvidarás.

 

¡Gracias a SHOW y a Laura Doré por esta oportunidad única y a Christian Arias, Daniela Guerrero, Hayden Phoenix, Steven Feralio y J.P. Monittola por esas increíbles imágenes realizadas detrás de la cámara!

¡Las Kardashian se vuelven salvajes para DASH Miami!

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Kourtney y Khloé Kardashian me pidieron recientemente que fotografiase una nueva campaña para el relanzamiento de su boutique DASH en Miami. Querían algo que sorprendiera e hiciera a todo el mundo pararse en seco en South Beach. ¿Qué mejor, pensé, que hacer que se desnudaran?

 

Bueno, esa no es toda la verdad. Les sugerí que se pintaran estratégicamente el logotipo de DASH Miami a lo largo de sus cuerpos, para mantener el anuncio por debajo del nivel porno. Yo no era un novato completo en el tema de la pintura corporal, ya que adquirí mucha experiencia con una portada que realicé hace unos años de Vida Guerra pintada como un tigre. Lo que si recordaba era que ESA pintura llevó hacerla más de 3 horas para una modelo y sabía que no disponíamos de todo ese tiempo. Así que llamé a uno de los mejores artistas de pintura corporal de Miami, Keegan, de Body Art by Keegan.

 

Volé a Miami y rápidamente monté una versión casi exacta de SlickforceStudio, para que las chicas se sintieran como en casa. Ellas decidieron seleccionar a dos de sus Muñecas DASH para unirse a la campaña. Una vez que las damas estaban todas en su sitio, experimentamos con diferentes poses y posturas del cuerpo, calculamos la colocación del logotipo y entonces fue cuando realmente comenzó la diversión.

 

¡Mi agradecimiento especial a mi ayudante de SlickforceStudio, Gabe Parra por estas increíbles imágenes!

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